Vayan por todo el mundo


Para el día de hoy (25/04/09):

Evangelio según San Marcos, 16, 15-20

(El Resucitado nos envía a todas partes.

La Buena Noticia no debe ser restricta a determinados pueblos, razas o condiciones sociales o espirituales. La Buena Noticia de la Salvación, de que Dios es Padre y sólo quiere nuestro bien no tiene límites.

El anuncio se realiza con palabras y con obras, indisolublemente ligadas por el Espíritu de Aquel que nos ha rescatado.

Con la palabra anunciamos al Señor Resucitado.
Con las obras, damos testimonio veraz de su presencia.

-En este mundo enfermo e inhumano, la caridad es prodigio. La caridad cura, sana, reconcilia, trae la paz, construye la justicia, restituye la dignidad-

Es un mensaje no exento de peligros.
Pero no hay que temer, Él vá con nosotros.)

Paz y Bien

4 comentarios:

Salvador Pérez Alayón dijo...

A pesar de mi situación; a pesar de momentos tristes o confusos; a pesar de situaciones de desánimo, de pesadez, de desaliento, me siento inmensamente feliz, y hay momentos que lo percibo y siento el deseo de besar a mi mujer, de cantar o gritar. Aunque, lo siento también, mantengo un gozo y alegría contenida.
Vivo sólo para querer transmitir esa felicidad a los demás. El Cursillo es un momento donde me realizo y me doy enteramente a predicar el Mensaje de salvación de JESÚS. Ni me entero de mí, ni de mis preocupaciones, sólo vivo presto a servir y amar como el SEÑOR me comunica. Claro, hay caidas, frustaciones, pasos atrás...etc, pero siento la Gracia y en ella me apoyo.
Un fuerta abrazo en XTO.JESÚS.

luispdzp dijo...

Querido hermano a pesar de todas las dificultades de la vida, a pesar de todas las tristezas, de todos los miedos y de todas las cosas malas que arrastamos del pecado, Dios nos da la fortaleza y la gracia suficiente para seguir adelante con nustras vidas y mucho más, nos da el empuje suficiente para que su Palabra llegue a muchas personas que ni siquiera la conocen. Gloria a Dios.

Dios te cuide.

Ricardo Guillermo Rosano dijo...

Salvador, yo me identifico totalmente con lo que expresas, y es también como bien enseña el apóstol Pablo: donde abundó el pecado, sobreabundó la Gracia. Y la Gracia contiene en el vocablo mismo el gran misterio: Gratia-gratis, se nos dá la vida y se nos sostiene por la Infinita Misericordia de Aquel que se hizo uno de nosotros y nos rescató de la muerte. Un gran abrazo en Cristo y María, y gracias por tu presencia constante. Paz y Bien. Ricardo

Ricardo Guillermo Rosano dijo...

Luis, amigo y hermano, son certeras y profundas tus palabras, te agradezco de todo corazón por compartirlas y por tu presencia. Que el Espíritu del Resucitado que nos sostiene y nos alienta, nos empuja y no nos deja caer, te bendiga a tí y a los tuyos y que todos podamos vivir en el día a día esa Vida en abundancia que Jesús nos trae hoy.
Para mayor Gloria de Dios. Un abrazo fraterno en Cristo y María. Paz y Bien. Ricardo

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