A María de Luján, en tiempos de la epidemia de gripe A


María,
Madre de Jesús
y Madre de todos nosotros
En 1630, en tu enorme pequeñez
y con tu amor obstinado
quisiste quedarte definitivamente en estas pampas.
Desde entonces,
las hijas e hijos de estas tierras
se saben acompañados y protegidos con tu presencia.

Hoy venimos a pedirte
por esta casa común que se nos ha regalado
y que llamamos Patria,
a la que asola una enfermedad,
la epidemia de la gripe A.
Madre,
vos sabés que muchos estamos enfermos
y que la gripe se ceba especialmente
en los más pobres,
cuerpos faltos de defensas,
almas en desamparo.

Rogamos tu protección maternal
para todos los que se exponen
cuidando a los enfermos
para todos los niños olvidados
para todos los abuelos abandonados
para todos tus hijos desamparados.

Y te pedimos especialmente
que intercedas por nosotros ante tu Hijo
Jesús, hermano y Señor Nuestro,
porque estamos muy enfermos
y no sólo por la gripe.

Andamos ciegos de no ver al otro
sordos de no escuchar el clamor de los pobres
mudos de una palabra que haga el bien
paralíticos de insolidaridad
y nos desangramos en falsas expectativas,
identidades y proyectos.

Ayudanos a curarnos el cuerpo y el alma
Para que ceda la gripe
Para volvernos al hermano
Para sanar de individualismo
Para rescatarnos para la Vida en abundancia
que tu Hijo logró para nosotros.

María de Luján,
que tanto amas estas latitudes
quedate con nosotros
reza con nosotros
ruega por nosotros.
Amén

Ricardo
Paz y Bien

6 comentarios:

Salvador Pérez Alayón dijo...

Amén, querido hermano, me uno a ti en oración, para que la Virgen interceda para irradicar este mal pandemico que nos asola.
Un fuerte abrazo para todos en XTO.JESÚS.

Anónimo dijo...

Muchas gracias Ricardo por compartir la música que el soplo del Espiritu está tocando a traves de los huecos de tu alma.Bastante herida últimamente pero siempre fiel a su voluntad. De verdad GRACIAS y seguimos rezando por nuestra patria y por nuestras familias.
Mario

silvina soul dijo...

me uno a su oracion pidiendo por todos y cada uno de nosotros,saludos...Silvina

Ricardo Guillermo Rosano dijo...

Amén, Salvador, debemos fortalecernos el organismo pero más todavía el Espíritu, ¡La oración común mueve montañas! Un abrazo en Cristo y María. Paz y Bien. Ricardo

Ricardo Guillermo Rosano dijo...

Querido Mario, como dice Pablo en la 2a carta a los Corintios "...llevamos este tesoro en recipientes de barro para que aparezca que una fuerza tan extraordinaria es de Dios y no de nosotros. Apretados en todo, más no aplastados; apurados, más no desesperados; perseguidos, más no abandonados; derribados, más no aniquilados. Llevamos siempre en nuestros cuerpos por todas partes la muerte de Jesús, a fin de que también la Vida de Jesús se manifieste en nuestro cuerpo...Por eso no desfallecemos...".
Estamos en pié y tratando de ser fieles por pura Gracia, y si algo bueno sale, no hay mérito propio, es eco de su Espíritu que nunca nos abandona.
Que ese mismo Espíritu del Resucitado siga iluminando tu ministerio, colme de alegría toda tu vida y acreciente la generosidad de tu amistad. Un gran abrazo en Cristo y María. Paz y Bien. Ricardo

Ricardo Guillermo Rosano dijo...

Seguiremos orando y confiando en el auxilio de su Amor Infinito, Silvina. Allí está nuestro refugio, nuestra salud y nuestra salvación. Un saludo afectuoso. Paz y Bien. Ricardo

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